miércoles, 17 de febrero de 2016

Exploratio

http://oniks-astarit.deviantart.com/art/loneliness-513469526

En el otro lado de la tristeza existe un mundo de colores cristalinos, traslúcidos como la soledad, todo puede ser visto, nada puede ser tocado, por ahí es donde transito cuando me sé más lejano, si acaso me canso de este andar único e incomprendido.

Hay quienes me ven como perdido, yo,
 desde mi propio avance, los veo como estancados,
y me desintereso profundamente,
y pierdo el sueño, estoy cansado.

Alejamiento


Proclamas aquello que no entiendes,
te concibes como aquello que no eres
te pierdes  pensando en negar tu error,
buscas desde él la verdad que has perdido.

Cuando te veo entre los tuyos, siento desdén,
como lo sentí en su momento de mí mismo,
perdido, vaciado, como una sombra buscando luz,
necesitaba cambiar para hallar lo anhelado.

Errante, inconsciente de tu falta, caminas en círculos,
en la intrascendencia con la que quemas tu vida,
me canso, me alejo hoy, mañana no será distinto,
en pos del amor saneado que se erige de sí mismo.

Una ciudad lejos, un planeta lejos, a galaxias distantes,
toda proporción importa poco a  partir de este punto,
son años de andar igual y entender cuando no hay retorno,
si las palabras no se tocan ha ganado la distancia.

Me pierdo, el plomo se convierte en oro y ya no puede volver,
pero quien nace desde su propia luz debe ser alcanzado,
no mira hacia abajo, no gira a sus espaldas, está ocupado,
en el camino venidero que los otros no alcanzan a ver.

No hay consecuencias conscientes para el que no establece leyes,
pero estas recaen implacablemente, no se apagan,
ese torrente de ácido que evito a toda costa,
en la experiencia que me otorgan vidas pasadas.

Busco mi luz, entonces cualquier sombra se me hace fatua,
cuando el sol me quemaba, las buscaba con ahínco,
ahora el fuego es una caricia, no dependo sino de mí  mismo,
y por eso doy pasos lejanos que no se detendrán.



...con el mismo egoísmo con el que un lector busca en un libro que no ha escrito rasgos propios, tu imagen de mi persona es una reconstrucción de la tuya, mas ten por claro que no me interesa acuñar más soledad...



Para un amigo

...yo creo que a estas alturas de la vida lo único que puede apartarte de darlo todo es el miedo, pero el miedo siempre está ahí, es como la sombra que se proyecta cuando la felicidad empieza a tomar forma sólida, por eso es parte del hábito, como la noche, lo aceptamos como algo natural. Por demás, toda sombra existe solo cuando la luz le da de lleno a lo que tiene forma, y si esta es la oportunidad de haber encontrado tu propio sol, ¿Qué debería detenerte?, nada...

Duermes

http://kelly1412.deviantart.com/art/Let-the-devil-sleep-Azula-319599170

Duermes, bendices el aire que llevas a tus sueños,
la paz de la que el mundo cada día adolece
colma esta noche el rincón de tu descanso,
y me piden mis labios que a los tuyos bese.

Duermes, y sé que al despertar serás una despedida,
dirás adiós con ojos tristes aferrados a los míos,
y no seré más que el puente entre la vieja herida
y una sonrisa honesta desde mis palabras.

Por la mañana, ocultaré que habré soñado que te quedas,
te irás libre para que tu vida al fin florezca,
yo simplemente fui feliz con oír desde mi tu risa,
puede irte, mas por favor, hazlo sin prisa.

Desbordante


Cuando hablas y entretanto la voz escondes
porque rozas con peligro aquel secreto tuyo,
tuyo y que al tiempo se ha vuelto también mío
entre sus silencios lo que oculta instuyo.

¿Cuántas caricias se duermen en la distancia
de dos vidas que se cruzan tardíamente?,
¿Cuánto anhelo escondido revela la instancia
de un saludo tímido a la vez que ardiente?

Y el adiós distante como las miradas
que se lanzan buscando, y sin saberlo,
volver las palabras del uno hacia el otro,
lleva hacia el sueño de nuevas escapadas.

Encuentro


Como ese cruce en el que el sol aún permanece
y se abre de estrellas aquel telón infinito
se tocaron nuestros mundos sin que fuese
evitable, engañándonos en la piel de lo fortuito.

Cuando tu mirada, como luz de primavera,
proyectó mis sombras mientras me abrasaba,
presenté sin cuidados mi forma verdadera,
pudiendo ser como siempre y más feliz por tenerte.

Y agradezco cada vez que te encuentro tras tus ojos,
y las gotas de luz que lanzas desde tus pestañas,
que me llevan a esos mundos entre los que viajas,
y que al volver a los míos también me acompañas.

lunes, 8 de febrero de 2016

Inter Astra


La concepción de la existencia propia, su entendimiento, tiene aquella estructura escalonada que nos acompaña en cada acto que sobrepasa este plano de presencia, desde lo pequeño o lo infinito, sabemos cuando arrancamos pero desconocemos el alcance de nuestra propia mente.

En  el firmamento y su observación existe el placer del arrobamiento por el espectáculo inmediato, por su inmensidad astral, el cielo nos ofrece la oportunidad de mirarle por las noches para que, en la visualización de nuestra pequeñez, entendamos que solo somos gigantes frente a la escala de nuestra propia vida, y de las herramientas que esta nos otorga para hacerla feliz.

Sin embargo, al escudriñar en los detalles y dimensionar la existencia misma de las estrellas, nuestro estado de conciencia puede atravesar los límites del yo, para entonces simplemente estar, tal y como sentimos que están las estrellas, en ese instante en que el tiempo se relativiza completamente.

El cielo nocturno es de tal profundidad, infinito, y escapa tanto a nuestro alcance, que nunca dejaríamos de apuntar lo que nos quiere decir en cada noche de presencia:

Si se ve al firmamento como un mapa social, se observarán estrellas que se ubican en aparente cercanía, y otras están a una distancia evidente incluso a nuestra percepción, y comenzamos a agruparlas, pero en realidad, incluso para ellas mismas están infinitamente lejos, de hecho la luz de las unas no toca a la de las otras, y también pasa así con las personas, cuando se considera cercano a alguien solo porque no está tan lejos como el otro.

La luz que nosotros vemos existió hace mucho y solo estamos viéndola ahora por su velocidad de propagación y la distancia que nos separa, es un poco nostálgico pensar en cómo nos maravillamos frente a algo que ya no existe, incluso el sol que está a nuestro lado tiene 6 segundos de retraso para alcanzarnos. Y también es con las personas más brillantes que demoramos un mayor tiempo en entender y luego poder ver su luz, es más, solemos hacer eso cuando su tiempo inmediato ya cesó.

Y así como el agua propicia y emana la vida desde sí misma, el reflejo de las estrellas en ella amplía los horizontes de entendimiento de nuestro vivir, es como si bajo nuestros pies existiese una fuente de energía equiparable a la del cielo.


Solo podemos ver las estrellas sobre nuestra cabeza primero por nuestra pequeñez, y segundo por necesitar de un piso sólido en el que sostener nuestros pies, para enfrentar la incertidumbre misma que es la vida, pero no debemos olvidar que somos un elemento ínfimo en un mundo que se rodea de estrellas desde todo ángulo.

Marfil


Ahora que lo pienso, recuerdo como un tono gris difuminaba todos los colores en aquellas tardes en que paseábamos libremente con nuestros amigos, desde el cielo que se cerraba celosamente, hasta los transeúntes que parecían siempre distantes, la vida del mundo languidecía ante mis ojos y contaba los minutos desinteresadamente.

Fue justamente en uno de esos andares ensombrecidos que me dejé caer sobre un montón de telas de alguna de las tiendas que visitábamos, y justamente entonces cuando te dejaste caer sobre mí riendo alegremente, rompiendo ese amurallado que suelo tener frente a terceros, permitiéndome sentir tu calidez, apretándose mi pecho en una sensación realmente nueva, que llevó mis sentidos a actuar por sobre su trascendencia física.

El aroma de tu cabello, la luminosidad de tu rostro, el descuido de tu risa, la suavidad de tu piel, y el sabor que tuvo la cena que selló aquel día, marcaron mi percepción del mundo, que aunque fuere a raíz de un instante en el que apenas se suspira, llenaste mi entorno de un tono marfil que fue limpiando aquella frialdad que sólo me permitía ver un camino, y uno sin alrededores.

Muchas Gracias